domingo, julio 22, 2007

XIMENA MAY


Nada por el calor porque todo se pegotea. Pero la formación paulatina de grumos-producto de un empastamiento interno- que no se disuelven, sino que empeoran su tamaño y a los que finalmente y con alguna suerte se le ven los ojos primero. Al final sale la cola. Son los que más me gustan. No importa dónde si papel o teclado. Pero la tinta verde o roja de birome me paraliza. Cada libro genera sus propias reglas de corrección y crecimiento.

Cuando el futuro libro va tomando cuerpo es imprescindible una copia en papel y una lapicera para laburar sobre algo más concreto. Prefiero el ruido de la calle y la música fuerte a la misma vez y levantarme mil veces a poner a lavar ropa o regar las plantas cosa que tranquiliza mi ansiedad, cocinar no funciona porque se me quema todo.
A veces me visto de alguna manera en especial para crear esa cuestión ritual, pero sin demasiado resultado.

Cuando era más chica se me ocurrían cosas antes de dormir, ahora caigo como un tronco y espero que resurjan a la mañana. No puedo escribir si no es en Arial, la Times New Roman me parece espantosa y la primera cosa que hago al entrar a un archivo es cambiar todo por Arial 11.

En realidad, todo empieza con notas sueltas en un cuaderno o un archivo de Word que generalmente tiene nombre como “basura”, "cualquiera", donde se van acumulando cosas de una misma familia. La filiación es en algún lugar de la cadena del ADN y a veces imposible de distinguir. Esas hilachas que siempre están al final del archivo, si logran remontar el río suben a las páginas anteriores y se convierten en poemas o simplemente desaparecen.

A la vez que los poemas crecen, lo hacen las gramáticas que los rigen, el desbole inicial toma de a poco algunas constantes o ejes que lo organizan y el plan se define. A veces es necesario, en este punto, cierta investigación que en general es en Internet y no sólo incluye textos en castellano sino también imágenes y cualquier otra cosa que se cruce. En el caso de Deshuase la lectura de las crónicas del difunto Enrique Sdrech fue absolutamente determinante. Néstor hizo que leyera sobre naufragios y sobre la Antártida en general mientras que Oftalmología me llevó a los libros médicos. Estas lecturas complementarias son fundamentales para el fortalecimiento del libro porque ayudan a crear ese estado mental que supone para mí estar en el proceso de escribir un libro. Me resultaría imposible estar con más de uno a la vez, como hacen algunos irresponsables.


Es imprescindible que los textos descansen antes de masacrarlos nuevamente, lo que parecía un hallazgo al otro día es pretencioso o pertenece a otro libro. No creo en la partenogénesis donde las partes nacen ya terminadas sino en el trabajo duro de ajuste y precisión. Además, hay cierto placer en el sufrimiento de cambiar y volver a cambiar algo de lugar hasta que me convenzo –aunque sea momentáneamente- de que tiene el lugar que necesita. No todos los libros tuvieron la misma cantidad de correcciones, algunos parecen más claros de movida. En general queda una cuarta parte de la gran masa inicial.


Primero aparecen palabras sueltas que forman ideas que "linkean" con otras palabras y otras ideas que llevan a un universo interno. Después viene la ley: reglas sumamente arbitrarias y caprichosas con las que disfruto. Todo el tiempo y cada vez todo tiene que sonar acorde, no tienen que sobrar sílabas ni las acentuaciones pueden negar oponerse a las palabras o ideas sobre las que trabajo. Un sonido fuera de lugar es la mejor manera de eliminar basura.

 

 

Poemas

 

con un hueco verdoso en la herida

mancha calentita de pis en el colchón

eso también irrita piensa Ceci

una mancha con millones de gatas peludas pardas

echamos kerosene y se prende fuego todo

 

resortes

 

colchones de colonia con aureolas

cantidad de internados

condiciones mínimas requeridas por el establecimiento

asistencial albergue de pacientes

cantidad de profesionales por paciente etcétera

la posibilidad de seguir participando

cantidad de piel con golfos

taladrada por la posición en la cama

un solo secador de pelo para secar

por pabellón las escaras en talón culo codos

 

 

invierno nada en Luján

 

 

los bichos encanastados

una pinza para arrancar molares

el punto exacto en el cuello

la doctora

los distingue

en los surcos del barro

pájaros que comen de otros

pájaros que migran

cuando un ojo de lenguado

se va al segundo hemisferio

 

apreciaciones sobre la desaparecida

 

tenés muchos agujeros Cecilia

más que el resto de las mujeres

que nadaron por el Luján

todo el cuerpo patinoso

como una milanesa

de seso el sábalo

es otra posibilidad

 

los internos confunden colchón con pileta

 

la doctora sufre como una mariposa rosa

que no puede irse en el viento

como la ceniza del Hudson pierden

el control de las manos

en la orilla

impedida por la espuma respira globitos detergente en el barro

medio arenoso

el tomate

de los sanguches en verano

2.53 pm entre los médanos

 

movimientos del coro

 

las diminutas partículas de tierra

depositadas por un río largo

sobre un femenino caucásico

grupo de islas varicelas

de arena misionera

ensucian la porcelana del cutis

vasta planicie babosa

 

nuevo estómago

 

dura de miedo

mi hermana

cuando entran a construir el nuevo ramal

el entubamiento del Maldonado causó graves

trastornos en el tráfico de Pacífico y tuvieron

que mover las paradas de lugar

 

ablación e implante

 

el cuerpo se ordena adentro

cuando médico abre abdomen

frente a River agosto de noche

parecen manual de sexto grado

las imágenes fuera de registro

los bordes amarillos

a la izquierda como bilis

como los juguetes cuando cerramos los ojos adentro del cajón blanco y naranja saltan de la

fórmica juegan pero Cecilia y yo sabemos lo que pasa con las colonias de cosas doctora me

escucha?

una inesperada derivación tuvo en la víspera

la investigación que se efectúa en torno a la

desaparición de Cecilia Enriqueta Giubileo al

trascender ayer que la médica había sido vista

en San Juan

 

Alicia podría ser telescopio si supiera por dónde empezar

 

los pulmones mutan aceleradamente son

radiadores las manos de milanesa a pala mecánica

cuando saca el cuerpo del agua

marrón verde marrón marrón

 

llevan a diputados el caso

 

por ejemplo los genes de lenguado

que se han introducido al tomate

buscando darle resistencia a las heladas

podría introducirle a mi hermana

los intestinos que vomitó en Córdoba

el cuerpo sin órganos

podría ser Rojik

la cáscara de naranja

por tercera vez

en la banquina junto con todo el almuerzo

 

huimos a Córdoba

 

hay problemas con la guía visual

cada vez que frenamos Cecilia histérica

en mi hermana el cuerpo de una persona Cecilia

fallecida se desfigura

cuando se le extraen los órganos

multitud de bichos

lámparas llenas en la YPF sobre la ruta hacia La Falda

chocan la cara todos

aletazos de sábalo queriendo

volver a la colonia las palomas

en la Plaza Houssay los evangelistas de traje

con cuarenta grados

en la plaza con palomas

parecen seguir el mismo patrón de comportamiento

 

km 2.054

 

qué olor a mariposas sobre el motor

hirviendo cuando andábamos toda la noche

el radar caliente

quiero las llaves para entrar al baño de la YPF

 

afectadas

 

de azufre ceniza volcánica del Hudson en 1991

tiene Rojik en la cabeza

los delirios del médico residente

se le fueron

una vez cruzada la general paz

maneja despacio

 

ondas amplificadas por la cúpula ondas que retumban los agudos sólo se escucha

 

una voz

 

en Puente Saavedra

que dice

pare de sufrir

 

la esponja

 

la vegetación espinosa los montes de coníferas

los bosques de caducifolias las coníferas

adentro pasto amarillo de tres meses

de pelopincho

el arenal

los esteros lagunas abajo

todo lleno de Cecilia

toda Cecilia convertida en el agua mineral que tomamos

en una YPF

 

tiraban los apéndices a un pozo

 

después de cincuenta años

son los suelos de mayor fertilidad

y valor económico del país

buena estructuración granulosa

donde van todos los tumores extirpados

las mandarinas la naranja

las partes que sólo conectan

ropa su estetoscopio también

 

San Jorge con garzas

 

suelos

pantanosos o semipantanosos

orgánicos

suelos por acumulación de restos

escasamente descompuestos

ruega por nosotros

 

las moscas

 

Rojik anda con el abdomen

abierto con boca llena de guiso

y los pantalones bajos

pasamos por Sierra de las Quijadas

un embole a veces mi hermana se parece

a Cecilia un gesto de pescadito muerto

 

ruta: tejido conectivo

 

la distancia entre las YPF

en la provincia de Córdoba

la forma en que se ordenan

los pedacitos de manzana

en gelatina verde

el mapa glandular

declarado reserva mundial por la onu

 

con gusto a río

 

le pusieron

un Giubileo

afeitan los pelos del cuerpo

con agua hirviendo las obsesiones

los caminos químicos en la cabeza

que producen las gorras reglamentarias

de goma naranja Córdoba provincia

frío en la ruta de altas cumbres

sobre el piso pelado

la camionetita con olor a hongos negros todo el tiempo

mi hermana vomita

 

siguen yirando

 

la YPF desierta el día de año nuevo

pinchamos radiador 78 kilómetros

después de Alta Gracia quisimos ocupar nuestros lugares

en la camionetita recién adjudicada japonesa

que antes llevaba cirujanos del Borda al Torres

sacamos un poco el easy slider

para estirar las piernas

la heladerita queda en el baúl

 

antes de ser empanada se preguntó

 

Cecilia cómo será una cámara

registrando la muerte celular el potasio

que también tienen las bananas

 

crían plumas

 

dan vueltas a su cabeza plateada

por la luz en el acceso norte

el tanque refleja y mordemos la banquina

 

aire pesado de verano

 

cuando reventaron a Rojik

contra el paredón celeste

 

De, Deshuase

 

Temprano

 

los filamentos

pelo

cuando abro los ojos a la mañana

y el cielorraso

como en un cine hace de telón

plano pongo todos los bichos

y les miro la panza

los brazos obturo inicio

reinicio por el flanco derecho

un anélido

come de la mano de una hidra

espero estén conmigo mañana

 

vidente

 

la doctora habla normal

sobre los bichos en el líquido del ojo

¿cuándo mira objeto blanco?

¿cómo naves en el aire? ¿cuándo las busca?

moscas volantes fisiológicas

en el aire en el líquido del ojo

diagnóstico tratamiento no hay

y por qué no doctora en vez de bichos

obtener visión

de mutaciones en el orden

anomalías en el comportamiento

la química cerebral cuando usa

toma desecha decisión de algo

y lo ejecuta

alcanzo hasta esas medias secándose en la estufa

después de haberlas usado en las botas

 

 

lentes de contacto

 

abría mucho los ojos

para que el cielo se acercara

hasta adentro mío podía entrar

por el espacio celeste

secar y refrescar

mis ojos de plástico

podía entrar

 

Los párpados

 

estiro en once lycra y puedo ver

la parte blanda de los cuellos de tortuga

cómo entra a la cocina Katia despacio

a tomar agua despacio pero ágil

el mar podría traer

el mismo mar que miro

podría

traer

una pelota

una sandía

el mar como una manta

podría traer más arena

mientras Katia mira

y me vuelve a mirar

un día la dejé sobre una plataforma

petrolera en la cocina con dos bancos

juntos y en el medio ella

una princesa de Gualeguaychú

la misma cara de terror

al desintegro

 

fondo de ojo

 

los jardines en las casas alquiladas

paredes de ladrillo agreste

infinidad de telas de araña

chiquitas pero tupidas también

blanco del polvo que vuela

fortalezas

igual a tu espalda

el jueves

perpendicular al colchón

mira hacia afuera

esperando el momento

no me animo a meter un palito

 

visiones de refracción

 

si la cabeza permanece

en hawai no así

sus miembros

que perturban quietud

con mínimo contacto

un ejército de hormigas

le provocaría meningitis

frente a mis ojos la pared

recta y bien terminada

señala el lugar de exclusión

ya intenté el bombardeo masivo

procesiones discretas

y los días festivos echar alcohol

una hormiga queriendo

sin acceso al frutal

 

la misma sandía

 

fruta que se corta al medio

pierde 94 por ciento de agua

queda la costa en situación expuesta

esto es el vacío

volver a casa

por sarmiento al 1900

presenciar la mampostería al aire

azulejos celestes en el borde del cielo

caños moldura piso tres

 

la atracción entre cuerpos no sólo se aplica a los planetas

 

tengo un rollo sin revelar

con últimas vacaciones el cumpleaños

prefiero el pigmento de las ciruelas

si cambian el color antes de caer

finalmente al pasto

el silencio en los espacios

atonta salgo rápido

sin acomodarme el sweater

 

el corazón

 

¿cuándo siente una ciruela

su carozo que la planta

y la sombra alejando su copa tanto?

¿cuándo

siente la piel quebrarse

hinchada

los ojos en exceso de vida abrirse al sol

reventando camisa botones

como Hulk increíble y verde

bajo la lluvia?

 

el espacio tiene modificaciones

 

un botón de más

un fideo que escapa al colador

todo en ausencia de amarillo

 

 

De, Oftalmología

 

 

Ximena May

 

 

Ximena May (1972), Néstor, edición cd-rom (2000); Deshuase, Ediciones Del diego 2002; Oftalmología. tsé-tsé 2005. www.ximenamay.com.ar

 

 

 

 

 


1 comentario:

Anónimo dijo...

Quería preguntarle a Ximena May si hay forma de conseguir Néstor. Leí un artículo de Mariana Bustelo que lo trabaja y me interesó realmente mucho. El trabajo que hace Mariana es impecable y lo que allí se lee de Néstor me pareció de una rareza nueva. Gracias y felicitaciones por la entrada a la infancia.
Ana